domingo, 27 de abril de 2008

Cadáver Exquisito de otoño

A continuación, el resultado de un juego: el cadáver exquisito. Luego de la creación en conjunto, decidimos que cada uno podría modificar las puntuaciones... entonces obtuvimos de resultado dos relatos.

Aquí uno de ellos:



Una noche de otoño tomábamos té (esta vez para dos) en silenciosa ciudad dormida.


De repente se dio cuenta que intentar esto no era posible, decidió salir afuera en busca del paraguas que había perdido, pero el humo la abrumó por completo, encendiendo la lámpara para ver mejor y pensando lo bueno que es una solución.
Sin embargo, la idea de que una estufa sugiriera tanto (pero tan de tanque) que parecía una película de Disney, cuyo final no era feliz sin emabrgo porque dejaba una secuela: quedarse pensado en que los justos medios carecen de sentido, sólo hay espíritu en los extremos.


Entonces paré y miré alrededor. Él, naranja, explotaba en esta estación y me hace burbujitas de saliva cuando se pone nervioso, como también apoderarse del puff... y así nomás desapareció, sin nada de eso de polvo de Hadas.
Sólo cuando se ayudaba a incorporarse a la cama mirando el florero, imaginando cuernos, pintando uvas, contando sueños, tomando capuchinos, esperando pasar al otro lado del espejo. Confiando en que ese lado está ahí donde la lectura del lobo estepario le arrojo luz sobre cómo debía interactuar.

Soñaba con peces y llanuras azules surcadas por mares de montañas, gigantes en sábanas almidonadas con perfume a lavanda traída del este de la India. Dar (y dharma) y del alma. Dar luz. Como el sol en otoño: amarilla.
Y como ser rúcula era demasiado, la cosmogonía de las plantas lo hacía pensar que el bosque (no tanto como antes, pero mucho como ahora, un poco como mañana).
... pero siempre quería volver a Humahuaca. Sabía que una vez jubilado iría allí.


Amaba las hojas que caen como ésta, no tanto de un árbol como de un pensamiento, azul, verde, amarillo.
Un pensamiento puente que tiene un sonido a tambor, que haría estremecer a toda América invitándola a la plaza a hamacarse un rato, para disfrutar los días del fin del mundo occidental (que fagocita la diversidad generando un destino de extinción)



...y es por eso que el otoño inspira poesía ¿sabías? Es por eso que inspira la necesidad de refugiarse en todo tipo de arte y como parte de la creación de la más genuina, germinación de una semilla interna elevada al exterior para descubrir que la conciencia universal es posible pero no como un todo individual sino integrándonos como partes del todo.

3 comentarios:

Fernando García Pañeda dijo...

Se comprende fácilmente por qué le pusieron ese nombre. Sobre todo lo de exquisito.

Unknown dijo...

"El cadaver exquisito", antíguo juego de entretenimiento de salón que fué creado a principios del siglo XX por la corriente surrealista. Recibe este nombre porque la primera frase del 'juego piloto' fue Le cadavre exquis boira le vin nouveau (el cadáver exquisito beberá el vino joven). Neruda y Lorca los llamaron 'poemas al alimón".
Es un juego o proyecto colaborativo en el que están involucrados dos o más participantes, pueden ser infinitos, tantos como se quieran, y que consiste en ir dando cuerpo a un material común, de forma lineal y sucesiva, partiendo de una palabra, frase, párrafo, texto trazo o bosquejo, que el siguiente participante debe enriquecer con un aporte propio, conociendo únicamente los aportes preliminares.
El resultado es algo que no sería posible con el trabajo de una sola mente.

Los principios del juego son los siguientes:
Es una creación grupal, participan dos o más personas.
Debe realizarse como un acto lúdico.
La intuición desempeña un papel importante.
Se juega en grupo de manera que no existe la individualidad de un creador.
Expresa el espíritu creativo del momento sin olvidar que es un híbrido.
Es un experimento de principio a fin, de voluntad paradójica, excluye los significados. No hay que olvidar que su intención inicial, como la mayor parte de las anticreaciones surrealistas, era la provocación.
Se juega durante un tiempo indefinido no tiene límite, los jugadores serán los que decidan su fin.
http://pedazodecaos.blogspot.com/2005/05/el-cadver-exquisito.html

Anónimo dijo...

anu, que lindo juego, me hacen acordar al colegio, jugandolo con nuria y no se quienes mas.
que bueno seria juntarnos esta misma noche a jugar a cadaver exquisito...