¿serán
los días, esos que se van
sin que
pueda escribirlos
o los
recuerdos
esa
pelusa imborrable en la mirada?
¿será
quizás el desconcierto
acerca
del día que nace
del sol
que se levanta
la luna
que se hunde
amistades
que se achican
cuerpos
que sienten más punzadas
en la
costura cotidiana?
¿será
el amor que se hace intenso
el aire
que olvido en los suspiros
los
abrazos que nunca son tantos
las
horas con los libros
o
intentando ganar algo de dinero?
los
días, tan maravillosos y únicos
las
palabras tan efímeras e insuficientes
la
memoria, esa bolsita de sorpresas
(llena
de caramelos)
el
deseo de saber qué viene
la
distancia de la muerte,
“el
paso del tiempo” dicen
en cada
cuerpo, en cada relación
dibujando
territorios en el alma
como el
río dibuja curvas
en la
pampa, en su lento viaje al mar
el amor
que es tan intenso
en todo
y en cada instante
la
nostalgia de un mundo de cuna,
de
hamaca y de juegos…
el
desafío de sostenerte por tu cuenta
(en
todo, como sea)
¿seré
yo quién arranca de mi pecho los ríos
por no saber cómo dibujar sus curvas?