sábado, 12 de septiembre de 2009

Hadas. Vuelan lejos de mi mente…. en mis sueños, allí se quedaron ¿y dónde será ese lugar? Bajo los pies supongo, porque siempre hablan de aquéllos rotos. Yo quería pedir deseos y esperar a que sucedan, pero me cansé de esperar así que empecé a ver curiosamente hacia fuera, afuera de la cajita musical. Ya no sonaba ese alegre la la laa sino que me aturdian pepepeeeeeee de bocinas y brumn bracta ta tucutum padum piiiiii de autos, motos, gentes y trenes lejanos.
¿Hadas, dónde fueron? Había una azul, estoy segura, la de las mentiras y que decía que hay que ser un niño bueno para ser de verdad (¡qué suerte que yo fui niña!). También esas tres que estaban en el bosque: Flora, Fauna y Primavera. Eran como mis tías pero con alitas y unas varitas especiales. Con ellas hacían lo que quisieran y ni tenían que lavar los platos. Igual... pedían mucho a cambio, lo supe cuando empecé a conocer las travesuras de los duendes. Prefiero lavar y no abandonar el bosque.
También estaba el hada madrina, esa que cambiaba tu huerta por un lujoso automóvil que te llevaría de un sólo tiro a los brazos del príncipe (ese que sólo te querrá si vienes en tal carruaje y con spray en el flequillo). Cuántas sumidas en el olvido. Cuántas despojadas -deliberadamente- de mis sueños.

Hadas del mundo.
Eran muchas y prometían tantos mundos.

Ahora sólo pido
sueños a la luna
(y travesuras a los duendes)

3 comentarios:

Búho dijo...

Las hadas son un producto de una de las mayores anhelaciones de la humanidad: soluciones. Sentarse, deseary no tener que lidiar con el problema, total vienen las hadas, o viene Dios, o Kami-sama, o cualquier ente que nos va a solcuionar la existencia con un chasquido de la lengua.

Es bueno que te quedes lavando los platos, porque no se van a lavar solos, es también bueno sentarse y pensar que todo está bien y sentir el calor del Sol y disfrutar el sabor de los mates.
Pero no es para todos, no todos tienen esa capacidad.

Estoy orgulloso de vos, Anu

Unknown dijo...

No es -me parece- cuestión de capacidad el sentarse a tomar mate y pensar que está todo bien: es cuestión de decisiones, concientes o inconcientes, individuales y/o sociales... pensar que está todo bien es necesario a veces, no hay que ser perversos tampoco... disfrutar de la vida en cada instante, toque lo que toque, eso es más necesario. Aceptar y al mismo tiempo indagar, sentir el sol un dia de tarde al mismo tiempo que saber que hay quién no puede hacerlo... porque no "sabe" sentir, porque está en una oficina, porque junta cartones en un carrito, porque está en una mona... infinitos ejemplos se me ocurren...

Nos enroscamos a pensar en todo lo demás... en las demás gentes, no sé , creo que pensar... es un oficio ocioso a veces, que mejor sería hacer y después evaluar las consecuencias.

PACHAUITA dijo...

En aquél tiempo yo me adentraba por estos repliegues de medias partidas por estas palabras tuyas an(así he decidido llamarte..nosé porque)
No creas que me he olvidado de vagar por estos lugares...como verás cuesta, a veces uno sin darse cuenta de lo que pierde y de lo que gana si lo que pierde quiere perderlo al fin o no...uy! demasiado embrollo soy yo...en fin! amiga de luz me encanta vagabundear por estos huecos de inmensas ramas coloriacentuhadas!A veces uno precisa de las alas de aquéllas hadas y las travesuras de los duendes para no morir en vida..
Vas atener que perdonar mi ausencia este domingo 11, no te enojes pero no ando bien,se que me comprometí pero no puedo hacerlo,perdóname una vez más, me duele no cumplir con tu hada de esirítu...
hoy tu poesía me dio frecura y alivió un poco mis alitas... te quiero con esa luz pura que anhelo recobrar...te dejo mi regalo en esta frase que no es mía Y ES ALGO MALDITA:
"Y CUANDO ME FATIGUE DE ESAS FARSAS IMPIAS,
SOBRE MI FUERTE Y FRAGIL MANO POSARE,
Y CON MIS UÑAS,UÑAS CUAL LA DE LAS HARPIAS,HASTA SU CORAZON CAMINO ME ABRIRE..."